miércoles, 6 de junio de 2012

Pues sí, tengo miedo.

¿Que si tengo miedo? Pues sí, lo tengo. Si me preguntan seguramente pensaré un segundo antes de responder, supongo que por orgullo o pensando en que no le tengo tampoco miedo a todo. Que si me preguntan que si tengo miedo primero piense en las cosas que me dan más miedo y cuando vea que es real, responda: sí. Porque si lo tengo. Y miedo a admitirlo, no, ¿pero a afrontarlo? 
Esas cosas que deseo que lleguen pero a la vez tengo miedo. ¿Y cuando se acabe? ¿Y cuando se vaya? ¿Y yo? ¿Y el dolor? ¿Será realmente doloroso? Y lo sacrificios. ¿Tendré que sacrificar algo? ¿Perderé más de lo que gane?
A esta situación he llegado salvándome de un abismo que nunca supe superar, al que caía continuamente. Y si, tengo miedo al dolor. Al error, a la decepción, a la insensatez, al abismo. 

Yo también me pregunto: ¿Y si puedes volver a caer, porque sigues? 

Pues porque la persona que me puede tirar, es la misma que me salvó.

No hay comentarios:

Publicar un comentario